Uñas moradas acompañan mis caricias
en roces de eterno hielo
pierdo tacto y me arrugo
y soy todo bajo cero
Si falta el calor
es porque me lo he llevado
En su lugar abrazas la escarcha
y a un cuerpo entumecido
más parecido a una piedra
que a un ser vivo
Bruma roja brota
como vaho y polvo
manchando el reino de la tundra
al calor de la débil llama
en la única vela encendida
Sumidos en un invierno siberiano
de aromas inertes
de sonrisas sin dientes
con esta luz fría
que ilumina en rayos oblícuos
alargando la sombra
hasta que nos envuelve
Borroso se perfila el ocaso
y soplos de aire afilado
hacen que las lágrimas
nazcan sólidas
antes de rodar por la mejilla
Ni siquiera el llanto
suena como antes
solo es algo tortuoso
en mis oídos...
...Mi corazón
es un glaciar malherido
en este último vacío
Mi alma está lejos de arder
en este blanco infierno
Es un gélido inframundo
desde hace ya mucho
muchísimo tiempo
No hay comentarios:
Publicar un comentario